lunes, 30 de junio de 2008

LAS HERMANDADES DE HUMILDAD Y VERA-CRUZ TUVIERON UNA JORNADA DE CONVIVENCIA

Ayer domingo 29 de Junio las hermandades de Humildad y Paciencia de Cádiz y Vera-Cruz de Puerto Real, hermanadas desde hace años en la común devoción a Nuestra Señora de la Amargura, celebraron una jornada de convivencia en nuestra localidad que congregó a más de 80 hermanos de ambas corporaciones penitenciales.

La jornada comenzó a las 10 de la mañana con una eucaristía celebrada en la parroquia de San Benito Abad, sede canónica de la hermandad de la Vera-Cruz, por el Rvdo. P. José Vitini Díez, director espiritual de la hermandad puertorrealeña, a la misma asistió D. Francisco Domínguez Rivero, presidente del Consejo Local de Hermandades y Cofradías. Nuestra Señora de la Amargura lucía en el altar mayor y los miembros de ambas corporaciones aprovecharon para hacerse unas fotografías junto a la devota imagen.

Acto seguido la comitiva realizó un itinerario por los principales templos de la localidad. En primer lugar se dirigieron a la Prioral de San Sebastián donde les aguardaban los miembros de las Juntas de Gobierno de la Asociación de Nuestra Señora de Lourdes, patrona de Puerto Real, y de la hermandad de Jesús Nazareno, acompañados del Rvdo. P. Jesús Andrades, Vicario Parroquial. El historiador Manuel Jesús Izco y Paco Espinosa de los Monteros pasaron a hacer una introducción histórica y artística sobre el templo mayor de la localidad, pasando luego a visitar las distintas capillas del mismo. En la capilla de Nuestra Señora de Lourdes se rezó una Salve ante la Patrona para por último por la Casa Hermandad del Nazareno, visitando su colección de enseres.

Ambas Hermandades se dirigieron luego desafiando el calor a la iglesia conventual de la Victoria, sede de la Hermandad de la Soledad. Allí Paco Espinosa de los Monteros les hizo una semblanza sobre el templo y el importante patrimonio imaginero que alberga. Se terminó rezando una Salve ante Nuestra Señora de la Soledad para luego pasar por los salones de la Casa Hermandad de la Soledad y terminar con un refrigerio ofrecido por la citada Hermandad.

La comitiva se dirigió entonces de vuelta, visitando la Casa Hermandad de la Vera-Cruz donde se tuvo de nuevo un refrigerio. Nuestro Hermano Mayor, Manuel Miranda Lacalle aprovechó para entregar un recuerdo a David de la Fuente Carrasco, Hermano Mayor de Humildad y Paciencia, consistente en una bella instantánea de Nuestra Señora de la Amargura tras la restauración, fotografía de nuestro hermano Andrés Quijano de Benito. Por último ambas hermandades se dirigieron hasta la Casa Hermandad del Rocío, visitando sus instalaciones y dirigiéndose al bar que regenta dicha hermandad para tener una comida de confraternidad preparada con cariño por la hermandad rociera, la cual resultó muy del agrado de todos.

Desde esta hermandad queremos agradecer a todas las personas y corporaciones que han colaborado con nosotros y en particular a las hermandades de la Soledad, Nazareno y Rocío, la Asociación Nuestra Señora de Lourdes y a la empresa Carpas Muñoz Soto de Jerez. También un agradecimiento muy especial para Manolo Izco, a Andrés Damián, Tele Puerto Real, Onda Cádiz y a nuestro Director Espiritual José Vitini que nos acompañó durante toda la jornada.

Desde la Hermandad de la Vera-Cruz nos sentimos muy felices de haber podido recibir a nuestros hermanos de la Humildad y Paciencia, estrechando aún más si cabe los fuertes lazos de confraternidad que nos unen desde hace varias décadas, unidos en el común amor a Jesucristo y a la Virgen en su advocación de la Amargura. Nos emplazamos ya para el próximo encuentro que tendrá lugar en tierras gaditanas.