miércoles, 27 de noviembre de 2013

Bendición del libro de hermanos difuntos


El próximo viernes 29 de noviembre a las 20 horas y en la parroquia de San Benito Abad, tendrá lugar la bendición del Libro de Hermanos Difuntos de nuestra hermandad, dentro de la Eucaristía anual dedicada a nuestros hermanos difuntos que será presidida por nuestro Director Espiritual, el padre Juan Antonio Martín Barrera.
 
Con la bendición de este libro de hermanos difuntos, la Junta de Gobierno de esta hermandad ve cumplido uno de sus principales objetivos para esta legislatura, que no es otro que el de asegurar un lugar preferente a nuestros hermanos difuntos en el cortejo procesional y en todos los cultos relevantes de la cofradía a lo largo del año.
 
El libro ha sido realizado por nuestro hermano Francisco Espinosa de los Monteros Sánchez, realizando una investigación extensa de todos los documentos conocidos de la hermandad a lo largo de sus casi 500 años de existencia, agregando al mismo una interesante colección de grabados antiguos referentes a las devociones de la hermandad, de Puerto Real y de sus hermandades y cofradías. Asimismo, se presenta como novedad un desconocido grabado dedicado a nuestros titulares y ejecutado hacia 1850 por el grabador gaditano José Grillo y en el que se ven nuestros pasados titulares cuando aún estaban en el convento de los Descalzos. En la edición del libro y selección de materiales ha colaborado nuestro Hermano Mayor, Manuel Lobo Cuenca. También el historiador y concejal Manuel Izco Reina ha colaborado con diversos nombres de hermanos procedentes de su archivo documental. El libro se completa con diversas oraciones que nuestros hermanos los sacerdotes Manuel Gómez Sánchez y Juan Antonio Martín Barrera han dedicado a nuestros hermanos difuntos, así como una reproducción íntegra de la novena que el sacerdote jerezano Luis Gonzaga Montero y Morales dedicó a nuestro Cristo de la Vera-Cruz en 1876. Los textos manuscritos han sido realizados por don Pedro Hidalgo Guerrero.
 
El libro ha sido encuadernado artísticamente en piel en los afamados talleres de los hermanos Galván de Cádiz. Hay que resaltar que todos los costes que ha generado la edición y encuadernación del libro han sido sufragados por diversos hermanos, no suponiendo coste alguno para la hermandad, que sigue en su línea de reducir gastos extraordinarios en aras de poder colaborar más activamente en esta época de crisis.